Pintura
Miguel Rodríguez Núñez
Miguel Rodríguez Núñez nació en Sevilla. Estudió en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de su ciudad natal. Es pintor artístico y profesional con un impresionante currículum de premios y de exposiciones individuales y colectivas. (http://www.artelibre.net/MIGUELRODRIGUEZ/index.html) Miguel está en búsqueda constante de la espiritualidad tanto en su vida como en su obra. De su dibujo se ha dicho que tiene “el color de la memoria: un lápiz calibrado celebrando la belleza del espíritu que recuerda y sueña… y en su tamiz los grises se antojan plata trazados de espíritu (J. Antonio Tinte, Ldo. Historia del Arte por la U. Complutense de Madrid). Su cuadro, “Recuerdo de Urantia”, hace evocar en el lector de los escritos de Urantia el sueño de tránsito de una esfera morontial a la otra.
Ángela Álvarez
Ángela Álvarez, artista colombiana nacida en Bogotá y residente en Miami. Desde muy joven descubre su sensibilidad y pasión por el arte. Se gradúa en diseño gráfico y años más tarde se traslada a Miami con su familia, donde, debido a su pasión y necesidad de expresarse, decide sumergirse en el arte.
Sus obras son la expresión de un largo viaje en la búsqueda del verdadero ser, un verdadero significado en la vida y los verdaderos valores en medio de una vasta y sobreabundante cultura material.
En sus pinturas se refleja esta búsqueda interior, su visión y percepción del ser humano y de todo lo que le rodea. Después de muchos años de búsqueda, esfuerzo, trabajo, luchas internas y determinación, ahora sus obras son el fruto de una rica experiencia de comunión interior con el Padre y su amado Jesús. Cada pintura es una experiencia viva, rebosante de amor y gratitud; es como una maravillosa melodía que canta en su corazón, en la que su al alma se deleita y sale en una expresión de color, de luz, alegría de gozo, amor, gratitud y de plenitud que se elevan para solo adorar y exaltar el esplendor, la belleza, la bondad y grandeza del creador. Su deseo es poder elevar el arte a una misión más elevada de estimular e inducir a cada alma y mente a contemplar y encontrar esa otra realidad: la divinidad y la belleza que habita en cada uno, que lo llena todo y está en todo lo que nos rodea.
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Ángel F. Sánchez-Escobar
Ángel F. Sánchez Escobar nació en Sevilla. Es profesor de la universidad de esta misma ciudad, ensayista, traductor y escritor. Pertenece al grupo de pintura “Maestro Falla”, dirigido por el pintor Miguel Rodríguez Núñez. Ángel es lector de los escritos y tanto su obra literaria como pictórica reflejan mucho de sus enseñanzas. En su cuadro a acrílico, “Soledad acompañada”, se ve un camino solitario que conduce a la montaña, pero el caminante ausente, el autor de la pintura, no se encuentra solo: le acompaña el espíritu de Dios. Su cuadro, “El faro que nos guía”, representa de nuevo ese espíritu interior que le enseña, que le guía en el camino de la verdad, de la belleza y de la bondad. Su tercer cuadro, Hacia el templo del Padre, nos muestra a un monje que camina atraído por el templo que se ve en la alto de la colina, pero Ángel intenta describir esa llamada interior de adoración al Padre Celestial. Como su nombre indica, en el cuadro “Orvontón (La Vía Láctea)”, se ve desde la perspectiva de nuestro planeta, una parte del séptimo universo global. Su sexta pintura no es en acrílico sino en pastel y evoca un icono ortodoxo del siglo VI, el primero de los que se pintaron en todos los tiempos. Jesús se representa aquí con el rostro de forma desigual, una parte indicando su esencia divina y, la otra, su esencia humana. Su mirada también es inusual, uno de sus ojos nos dice, “te veo”, y el otro “te perdono”.